6 jul 2011

Flagrantia


Deja un espacio ascendente en mi camino
mientras retiro mis pesadas cargas...

Se titula en sus movimiento una estela,
dejando sobre paso amarrado el secreto,
mordiendo entre manteles los egos,
adormeciendo el tributo a los labios,
jamás amordazados, jamás llevados,
jamás alzados, jamás sellados.

Levanta la copa en señal de humildad
y eleva hacia el cielo la voluntad
tan alto como el ajeno dolor que escapa
de aquella luz que niega y no llena lo perdido.

Deja de lado las constantes represalias
y con el dedo del corazón toca su frente
dejando de soñar con montañas sagradas
dejando de crear fantasías olvidadas
dejando para siempre aquello que no amas.

Se abre camino a lo descubierto
observa silente el pasado desterrado,
extiende el cuerpo como en un pentagrama
abrazando a tus hermanos
caminando hacia el porvenir
con la conciencia en alto
y el amor en las brasas.

Se deja a la fortuna las ideas
y el idílico abrazo encuentra la materia,
se incrusta en el pilar de la vida humana
y escapa en un sutil suspiro
al éter de una mano alzada...

Aún se presenta en el teatro de lo posible
a veces lleva una estrella en sus manos
otras nada lleva, deja sus palmas abiertas
sin esclavos, ni regaños.
Se presenta con vestidos y a pies descalzos
baila como hoja en el viento de verano
sostiene su fortuna en una mirada y los aplausos
los transforma en oleadas.

Cubre con sus senos la cordura
engaña a la razón despechada
recubre la tristeza con sus garras
toma el néctar de la victoria y la conquista
de un alma remendada
en esencias de temperaturas excitadas
olvidando el requiebre de la soledad deseada...

Flagrantia...







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